lunes, 19 de mayo de 2014

La ciudad que nunca duerme

Ésta es una de las entradas que, tristemente, nos tocará escribir sin disponer de nuestras fotos. Para los que no lo sepáis, perdimos una tarjeta de memoria con fotos de más de un mes de nuestro viaje. Sí, tuvimos mala suerte, ya que la perdimos los días que tratábamos de hacer una copia de seguridad de ellas.

Entorno a una decena de fotos, las salvamos gracias a ser buenos hijos y hermanos y habérselas mandado a la familia o tenerlas en el móvil, pero el resto quedan para el afortunado que las haya encontrado en algún lugar de Tailandia. En fin... Vamos al tema.

Llegamos a Hong Kong ya de noche, pero enseguida comprobamos que se trataba de una ciudad-estado inmensa, pese a parecer un recóndito rinconcillo al sur de China. Cuenta en su totalidad con una población de más de siete millones de habitantes en un territorio dividido entre una parte continental y más de 200 islas.


Nos alojamos en el distrito de Causeway Bay, en la isla Hong Kong, por lo que pudimos manejarnos de maravilla por las zonas más destacables. Según salimos del albergue, eso sí, comenzó el reto agobiante de caminar entre manadas y manadas de gente.

Desde que llegamos, descubrimos que siempre hay gente por la calle. Da igual a qué hora salgas a dar una vuelta o qué día de la semana sea. Siempre hay gente. Eso sí, al día siguiente la mitad se duerme en el metro o hasta en los ascensores.

Empezamos comiendo en un vietnamita y paseando por el Soho y sus bares llenos de trabajadores occidentales (era de día, pero no encontré otra foto jejeje) y visitando las escaleras mecánicas más largas del mundo. Cuando oyes eso, piensas en unas inmensas y eternas escaleras, pero no. Inteligentemente, van subiendo las empinadas calles y disponiendo de cortes cada ciertos metros, para que cada uno pueda bajarse en la calle que más le convenga. En total, 800 metros de escalera, nada más y nada menos.





Continuamos el periplo hasta llegar a la base del tranvía que ascendía a la Cumbre Victoria (The Peak). En realidad es un funicular, pero lo relevante es que supera pendientes de hasta el 48% antes de alcanzar la cima.



Allí conocimos a Keith, un genial estadounidense que nos acompañaría en nuestra excursión del día siguiente por la isla de Lantau. Gracias a que nos hizo el favor de intentar mil y una veces sacar una foto medio decente con el móvil, tenemos un recuerdo. (¡BIEN!)




Tras desperezarnos, cruzamos medio Hong Kong para tomar el teleférico que cruza hasta aquella isla. Allí nos juntamos con Keith de nuevo y visitamos, rodeados de niebla, el gran Buda y el monasterio de Po Lin. Las fotos están buscadas adrede con niebla, para que representen lo que vimos y vivimos. Habíamos hecho unas fotos preciosas y quizás las haya mejores pero, realmente, el día fue así. Una lástima la pérdida...









Luego, tomamos un autobús local hasta llegar a Tai O, un curioso pueblo de pescadores que vive literalmente sobre el agua y que se encuentra en la misma isla de Lantau.



Cerramos la jornada, cenando y haciendo algunas comprillas en el famoso mercardillo de Temple Street, en la zona peninsular de Kowloon.




Como demás cosas a destacar, también visitamos la plaza de Times Square, donde coincidimos con una exhibición de productos españoles y promociones de la arquitectura de Gaudí, en la que pudimos catar un gazpacho y un jamón ibérico deliciosos, de la mano de unos cocineros de la tierra. (¡FOTOS MÓVIL!)




También recorrimos el paseo de la fama, desde el que vimos el archiconocido paisaje de rascacielos hongkonés y la escultura del difunto Bruce Lee. (¡Gracias Mariete por las panorámicas!)






Y cerramos con una visita al Mercado de las Mujeres, donde miles de personas se peleaban por comprar las mayores gangas de recuerdos e imitaciones de todo tipo. Además, se encuentra en plena zona de tiendas digitales y rodeada de calles con incontables puestos de comida.



Y con esto, cerramos el periplo hongkonés. Una lástima no poder mostrarlo con nuestras propias fotos, pero amigos, YE LO QUE HAY...

¡Pero seguimos! Próxima parada: MACAO

★★★ BESINES & BESICOS ★★★

7 comentarios:

  1. Como lo pasáis ehhh calamaresss !!! jajaja me alegro que estéis disfrutando de esta pedazo de aventura !!!! un besito a los dossss

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  2. Hermanos!!!con fotos o sin ellas la experiencia es vuestra!!! Y nos la describís fenomenal (yo con estas fotos sigo soñando con vosotros ;-))😘😘

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    1. Sister!! Y que lo digas! Lo de las fotos está más que superado. Hemos encontrado una alternativa: hay que volver a los países para hacer las fotos de nuevo. Y se acabó el problema!! ;)

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  3. Anica!!! soy Patri del master de Granada, me enteré de vuestro viaje y aquí estoy, muriéndome de la envidia... Que penica lo de las fotos,,,, pero bueno, la experiencia no os la quita nadie. Pues nada, a pasarlo bien, os iré siguiendo por el blog. Un besazo

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    1. Patri!! Qué sorpresa!! Aún recuerdo cuando me contabas el viaje que ibas a hacer con tu chico a Australia, me moría de envidia!! Al final me pude quitar esa espinita, bueno, ésa y muchas mas!! Jejejeje. Estamos haciendo un sueño realidad!! Está siendo una experiencia única! Mil besicos!!!

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    2. Ya me imagino...ahora soy yo la que se muere de envidia, Australia estuvo genial, por cierto nosotros también nos enamoramos de byron bay, fuimos de pasada y allí nos quedamos una semana, no nos hubiéramos ido.... Bueno, a disfrutar mucho. Un besazo

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